Auditoría Pública nº 78. Revista de los órganos autonómicos de control externo
Auditor 0perativo Vs Auditor financiero 149 Por otro lado, los estándares de auditoría operativa, que son más flexibles que los de la auditoría financiera y de cumplimiento, se basan en los mismos principios que las otras dos modalidades de auditoría, tal como se acaba de mencionar en el epígrafe anterior. De ahí que se considere que quien realice una auditoría operativa participe de las cualidades y conocimientos de los procesos de auditoría que se exigen al auditor financiero y al de cumplimiento. Otra cosa distinta a la auditoría operativa, aunque con muchas semejanzas a esta, es la tarea de la evaluación de programas y de políticas públicas, en la que no se precisa tanto de tener conocimientos de auditoría financiera y de cumplimiento. Evaluadores pueden ser los auditores y los que no lo son, si bien es cierto que por motivos de objetivi- dad e independencia, es recomendable que las evaluaciones sean llevadas a cabo también por auditores externos. En este sentido, INTOSAI se expresa del modo siguiente referido a los auditores públicos: “Sin embargo, las EFS [Entidades Fiscalizadoras Supre- mas] son actores naturales en la evaluación de las políticas públicas, debido a que tienen la independencia necesaria, pueden desarrollar o acceder a conocimientos metodológicos de evaluación y, sobre todo, tienen un conocimiento de las políticas públicas adquirido por sus otrasmisiones. A diferencia de las instituciones administrativas o de las organizaciones privadas, no tienen que demostrar su objetividad y asegurar su independencia del gobierno o de los intereses privados” (INTOSAI GOV 9400, para. 3.1). Por consiguiente, el auditor, ya sea público o privado, que lleve a cabo auditorías operativas para el sector público, es con- veniente que goce de la objetividad e independencia propia de cualquier auditor. También debería tener los conocimientos y la experiencia que otorga haber realizado auditorías finan- cieras y de cumplimiento, así como los propios de la auditoría operativa que se le encomiende. En este último caso, dichos conocimientos y experiencia no es preciso que los tenga el auditor individualmente, pero sí el equipo de auditoría en su conjunto. En fin, un auditor operativo no es un simple analista o evaluador, sino que ha de tener los suficientes conoci- mientos y experiencia en auditorías financieras y de cum- plimiento que le permita llegar a conclusiones y reco- mendaciones válidas sobre cómo contribuir de un modo económico, eficiente y eficaz a la buena gobernanza, a la rendición de cuentas y a la transparencia de las entidades u organizaciones auditadas.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy MTEw