Auditoría Pública nº 78. Revista de los órganos autonómicos de control externo

REVISTA AUDITORÍA PÚBLICA / 78 68 de gestión y de financiación, dando lugar a una importante dispersión regulatoria que, desde un punto de vista global, podría dificultar el objetivo global de no dejar dar a nadie atrás y dar lugar a la existencia de diferencias significativas tanto en el acceso como en las condiciones de prestación efectiva del servicio educativo de 0 a 3 años. 3. El modelo ISAM como propuesta metodológica hacia la auditoria operativa de segunda generación El modelo ISAM proporciona una propuesta para cumplir con los requerimientos establecidos por las ISSAI 300 y la ISSAI 3000 a través de una guía que presenta de una forma práctica instrumentos que permiten la incorporación de nuevos enfoques metodológicos para ampliar el foco de las auditorías, así como herramientas que facilitan la ordenación y realización del trabajo por parte de los equipos de auditoría. En efecto, el diseño de la auditoría incorpora el enfoque integrado de gobierno y el análisis de las partes interesadas. Adicionalmente, propone la utilización de la matriz de planificación 8 y de la matriz de hallazgos. El uso de estas matrices no es una obligación que se derive de las ISSAI. Es decir, se pueden cumplir las normas internacionales de auditoría sin utilizar las referidas matrices; sin embargo, su uso facilita tanto la ordenación de tareas como los procesos de análisis. De esta manera, la matriz de diseño ordena los trabajos necesarios para dar respuesta a las preguntas y subpreguntas de auditoría. Al mismo tiempo, la matriz de hallazgos introduce una dinámica de análisis lógico de los hallazgos, sus causas, sus implicaciones, las posibles buenas prácticas que se hayan podido identificar y que pueden ayudar a los gestores a mejorar la situación detectada. Este proceso de análisis contribuye a la formulación de recomendaciones útiles para introducir mejoras que corrijan las causas últimas que den lugar a las ineficiencias detectadas. 3.1 Ampliando el horizonte: enfoque integrado de gobierno y partes interesadas Como ya se ha señalado, el modelo ISAM se centra en los resultados alcanzados con los recursos públicos utilizados para la implementación de una política o programa. Para alcanzar su objetivo, el ISAM incorpora el enfoque metodológico orientado hacia una visión integrada de gobierno, con lo que trasciende la organización tradicional del sector público en compartimentos estancos para disponer de una visión global, tanto horizontal como verticalmente, que permita una valoración integrada del uso de los medios públicos. Al mismo tiempo, el modelo incorpora la visión de las partes interesadas, es decir, la visión de todos los actores del sector público, de la sociedad civil y sector privado que juegan un papel en la actividad auditada, añadiendo nuevas perspectivas al enfoque tradicional que únicamente prestaba atención a la entidad responsable de la gestión inmediata de la actividad auditada. De esta manera, la correcta identificación de todas las partes interesadas y del papel que desempeñan se convierte en una tarea de retroalimentación irrenunciable entre todas ellas. En consecuencia, la utilización de la metodología ISAM supone abordar un enfoque integrado, que engloba las distintas estrategias, planes, programas y actuaciones, ya sean de planificación o de gestión, acordados por los distintos niveles de gobierno para la obtención de resultados en las políticas o programas a las que se refiera la actividad auditada, al tiempo que considera las visiones, intereses y objetivos de conjunto de actores o partes interesadas para evaluar los resultados y logros alcanzados. En definitiva, esta nueva metodología conlleva incorporar al trabajo del auditor nuevos enfoques y procedimientos que se relacionan directamente con la necesidad de dotar a las auditorías de cierto enfoque evaluador. Así, el auditor manejará nuevos criterios que complementan y enriquecen a los criterios tradicionales de eficacia, eficiencia y economía. Por ejemplo, el enfoque integrado de gobierno conlleva incorporar criterios como el de coherencia vertical y/o horizontal. Es decir, tanto la coherencia de las intervenciones realizadas por los diferentes niveles de gobierno (coherencia vertical) como la coherencia que tienen entre sí las actuaciones realizadas en un mismo nivel de gobierno a través de diferentes instrumentos y que tienen incidencia directa o indirecta sobre el objeto de auditoría. La puesta en práctica del modelo ISAM requerirá la utilización tanto de nuevos procedimientos para recolectar y organizar la información como de nuevas técnicas cuantitativas y cualitativas para el análisis de los datos. De esta manera, para una política concreta, la aplicación del enfoque integrado de gobierno requiere la correcta identificación del problema sobre el que se pretende intervenir, el objetivo del programa, los niveles de gobierno implicados, las actuaciones realizadas por cada una de las administraciones, así como las partes interesadas y el rol que desempeña cada una de ellas 9 . 8. En este trabajo se utilizan como sinónimos “matriz de planificación” y ”matriz de diseño”. 9. GAO (2015) proporciona unas pautas muy útiles para identificar duplicidades, fragmentaciones y solapamientos que se pueden producir entre diferentes programas.